Esa que ves
Necesito escribir a mi antojo sin miedo sin merodeos. Necesito decir que no estoy Íntegramente aquí, donde dominan mis letras. Esto es reflejo, es inverso, es apenas el comienzo. Es la sombra del delgado objeto en un instante de luz y desde allí, lo inabarcable la incerteza lo infinito. Quizás pensaste que soy esa que viste esa que ves. Quizás me pusiste allí, en ese lugar, escaparate absurdo, donde me describiste. Lo siento, pero así como no es posible ponerle rumbo a los vientos, tampoco creo posible la lógica en el discurso sutil de este evanescente verso. No me describas no me critiques no me lapides ni me ensalces. Puedo no estar allí donde ayer me viste. Puedo no estar aquí donde hoy me leíste.