A contramano

Otra vez la vieja historia
de sentirme a contramano
del mundo que se dispara
apurado, enloquecido.

Y aquí me quedo mirando
a sabiendas, escondida
detrás de mi corazón
que late sin que le pida.

Mirando como tapizan
las flores de los lapachos,
presagio de primavera,
la tierra bajo mis pies.








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