Y si dejamos

¿Y si dejamos
de ponerle nombre
a las cosas, los hechos,
las situaciones?
¿No tendrá
la vida otro tinte?

En el carmesí brillante
vive la rosa y el tulipán,
pero también la sangre.

En el oscuro azul
los peces se mueven
con o sin luz,

y en el oscuro azul
persisten incendiadas
las estrellas.

En el verde respiran
las plantas
rebosantes de savia
pero también
las ranas y las iguanas.

Puedo fijarme
en el rojo, el azul
o el verde,
o puedo llamar a las cosas
con un corriente nombre.

Desplegar la paleta
de vivos o tenues tonos
y dejar que la Vida pinte
a su antojo, sin condiciones.

Comentarios

  1. Me encantó Andre , tenés que publicar es un don que tenés. En épocas difíciles nuestra bulnerabilidad se convierte en recurso y la creatividad salva el alma. Es momento de introspección.

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  2. Estoy de guardia y al leerte, los hombros se separaron de mis orejas y respiré..gracias

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